El ictus y las complicaciones del habla relacionadas con la disartria

El ictus o Accidente Vascular Cerebral (AVC) es una enfermedad cerebral que se origina por un trastorno brusco del riego sanguíneo.

Es la patología con mayor índice de incapacidad y mortalidad, afectando a 15 millones de personas en todo el mundo, frecuentemente a personas mayores de 55 años. Existen dos tipos de ictus:  el isquémico y el hemorrágico.

El ictus isquémico es el más común afectando un 80% de todos los ictus. Se origina cuando hay una oclusión del riego sanguíneo en una área determinada del cerebro.

El ictus hemorrágico se produce cuando hay una rotura del vaso sanguíneo. La alteración del riego sanguíneo produce que determinadas áreas del cerebro dejen de funcionar y aparezcan síntomas como: pérdida de fuerza o sensibilidad  de la mitad del cuerpo, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, pérdida de la visión o dificultad para andar.

La logopedia es la disciplina que se ocupa de la prevención, detección y tratamiento de alteraciones de la comunicación verbal como la voz, habla y lenguaje, alteraciones funcionales, déficits auditivos y alteraciones de origen neurológicos.

La intervención del ictus se lleva  a cabo a partir de tres tipos de alteraciones:

Alteraciones del lenguaje conocidas como afasias

Alteraciones del habla conocidas como apraxia y disartria

Alteraciones de la deglución conocida como disfagia

La disartria es la alteración del habla más frecuente en la población adulta después de sufrir afectaciones de origen neurológico.

Se caracteriza por alteraciones de control muscular de los mecanismos del habla, manteniendo preservada la programación del movimiento. Pueden estar afectadas también , diferentes funciones como: la respiración, voz, entonación y articulación, provocando  una pérdida de la intel·ligibilidad del habla.

Es probable que existan lesiones el  sistema nervioso central y periférico, que puedan dar a lugar a alteraciones del movimiento como :

Parálisis

Paresias

Debilidad muscular

Descoordinación y/o tono alterado

La disartria va asociada seis subtipos clínicos etiológicos:

Disartria fácida o de la motoneuronainferior

Disartria espástica o de la motoneurona superior

Disartria atáxica o cerebel·losa

Disartria hipocinética

Disartria hipercinética

Disartria mixta.